Ultracargo inició este mes las operaciones de su nueva terminal en Palmeirante, en Tocantins. Con una inversión de 161 millones de reales, la unidad refuerza la presencia de la empresa en el interior del país y apoya el crecimiento del agronegocio brasileño, ofreciendo más eficiencia y previsibilidad para el transporte de combustibles y biocombustibles en la región.
Para fortalecer el corredor logístico del Nordeste, la empresa también construyó un desvío ferroviario de 1,6 km, que conecta la terminal con la red de VLI y el puerto de Itaqui (MA). La solución garantiza una mayor eficiencia, sostenibilidad y previsibilidad en las operaciones, lo que beneficia el transporte de combustibles a Tocantins, Maranhão, Pará y Mato Grosso.
La ubicación estratégica y la conexión directa con el ferrocarril Norte-Sur aportan diversos beneficios a la región:
- ● Mayor distribución de combustibles y biocombustibles para el sector agrícola, las empresas y los consumidores;
- ● Reducción de la dependencia de rutas por carretera vulnerables al clima, el tráfico y las restricciones estacionales;
- ● Operación ferroviaria más estable, con menores emisiones de gases de efecto invernadero;
- ● Mayor previsibilidad en la cadena de suministro, minimizando los riesgos de retrasos;
- ● Logística más competitiva y eficiente en el transporte de larga distancia, con menos transbordos y mayor agilidad en el abastecimiento.
«La terminal representa una oportunidad estratégica para los clientes, ya que ofrece un acceso más fácil al transporte ferroviario, menores costes y una mayor eficiencia logística, lo que genera un valor real en la región, donde los retos de abastecimiento son significativos», afirma Raphael Nascimento, director comercial y de planificación de Ultracargo. Según el ejecutivo, la unidad también contribuye al crecimiento del agronegocio local, garantizando un suministro estable de diésel y biocombustibles, aumentando la productividad de las granjas y cooperativas, favoreciendo la distribución de insumos y productos con menor impacto ambiental, reduciendo los costes operativos y atrayendo nuevas inversiones, lo que fortalece la base productiva de Tocantins.
Para Fulvius Tomelin, presidente de la empresa, la inauguración de Palmeirante marca un paso importante en la estrategia de la empresa de conectar los polos productivos del país con una infraestructura logística eficiente, segura y sostenible. «La terminal fortalece el corredor que conecta el interior con el puerto de Itaqui, permitiendo tanto la interiorización de combustibles importados como la comercialización de biocombustibles regionales en el mercado externo», concluye el director ejecutivo.
Estructura de la terminal
La terminal de Palmeirante tiene capacidad para almacenar 23 000 m³ en 13 tanques —12 para combustibles y biocombustibles y uno exclusivo para el sistema de extinción de incendios— y cuenta con 1,6 km de vías férreas conectadas a la red local.
En términos de seguridad, la Central de Transferencia de Productos (CETRAN) opera sin mangueras, lo que reduce los riesgos de fugas y la exposición de los operadores, mientras que los sistemas avanzados de protección incluyen diques de contención y activación automática de espuma en caso de incendio. Durante la construcción, se adoptaron prácticas sostenibles, como la reutilización del agua en pruebas hidrostáticas y la eliminación ambientalmente correcta de los residuos generados.
Actualmente, Ultracargo también opera terminales en Rondonópolis (MT) y Paulínia (SP), además de puertos en Santos (SP), Río de Janeiro (RJ), Aratu (BA), Suape (PE), Itaqui (MA) y Vila do Conde (PA). La capacidad total de almacenamiento de la empresa supera los 1 millón de metros cúbicos.
Para conocer la unidad de Palmeirante, visite https://www.ultracargo.com.br/terminal/palmeirante/.